jueves, 5 de enero de 2012

El tiempo y mi abuela

Ya se cumplen tres meses desde que dejó de estar en forma física mi querida abuelita y mis ojos se humedecen con el recuerdo de su ser. Quizá hasta la poesía se robe un poco de nuestra vida porque a la mente me vienen recuerdos de Pablo Neruda "porque en noches como esta la tuve entre mis brazos"  y se enjuga en mi ser una algarabía de sentimientos, de sentir que fue nuestra y de sentir que fue mía. Quizá el tiempo es solo una ilusión que se vuela en el tiempo. Que en realidad todo es un sueño y cuando despertemos sigamos viviendo y llorando, viviendo y queriendo. Quizá un abrazo dure toda la vida y un beso todo un verano. Mis palabras solo reflejan lo cobarde de haber sido y no haber podido a tiempo expresarle a mi abuelita cuánto la quería. Pero sé que ella lo sabía y por eso siempre nos lo decía.